Je souhaite...

Y quisiera simplemente que aquellas impresiones de realidad onírica se volviesen completamente certeras. Quisiera que el laberinto del tiempo se decidiese por un camino concreto, o al menos algo parecido.

Secret

Elle vous aime, c'est secret, ne dites pas que je vous l'ai dit.

Ajedrez

Desde aquel día no había movido las piezas sobre el tablero. El tiempo continuaba su camino, y a su paso, esculpía más y más mi temor. Parecía increíble el que tantas personas se dedicasen a planear estrategias sobre mi vida, siempre de manera egoísta, priorizando sus intereses ávidamente.

Me había vestido con un aire francés, París se hacía cada vez más necesario dentro de mi cabeza. Deseaba volver a sentir, de alguna manera, sus callecitas transitándome. En aquellos momentos podría decirse que había sido feliz, a pesar de la superficialidad de los pensamientos. Él, aunque nunca estuvo allí, también lo adoraba. El sueño de la noche anterior, tras ese pensamiento, me despedazó la razón.

Llegué a nuestro punto de encuentro escuchando, como de costumbre, The Velvet Underground. Mi amiga más cercana me cobijó con una de sus sonrisas, aquellas que, a veces, alegraban por completo mis días. Filosofamos un buen rato, como siempre, hasta que, mientras me lamentaba, me golpeó la rodilla y me miró significativamente.

Allí estaban. Sus risas alimentaban el aire, y descolocaban a todos aquellos que estaban de paso. Comencé a sentir las miradas rencorosas cuando nos saludamos. Ya nada podía volver a ser como hacía siete meses atrás, habíamos pasado demasiado.

Había planeado sigilosamente todos mis movimientos, había especulado todas las posibles jugadas. Todos podían jugar con La Reina, pero ella era quien tenía la decisión final.

La monotonía no nos abandonó esa noche, y ya no podía soportarla; pero el arriesgar me petrificaba. El juego se congeló, imitándome. Durante todos los últimos días estuve igual, ya era incapaz de mover. Mis enemigos buscaban arrebatármelo todo, jugando sucio.

Ya no podía hacer nada, nadie podía, ahora era el turno de que El Rey se moviese...

Bipolaridad

Y seguía allí, sin más que reducirme a aquella oscuridad que me invadía, que iba poco a poco apoderándose de mí por completo. ¿Hacía cuánto tiempo que me encontraba allí? ¿Meses? ¿O acaso ya eran años? Nada era certero, no allí. Detrás de mí, las retrospecciones me comentaban que en el exterior todo era de carácter onírico. La concepción de vida había llegado a mí en aquella celda, era una realidad irrevocable.

Un hueco abarrotado, a través del cual era posible observar la claridad del cielo, era la única luz que mis ojos habían visto durante aquella vida de inciertas vanidades y dramatismos. De algún modo, el pálido celeste me encandilaba; pero también me fascinaba. Me hacía perder el control y de repente me encontraba suplicándole desesperada que me tendiese su mano para salir de aquella realidad banal.

La bipolaridad del mundo era clara. Siempre había dudado de ella al ser una persona con tanta determinación, pero era algo que hasta el mismo cielo te aseguraba con los radicales cambios que mostraba a lo largo de una jornada.

Oh, bienvenue !

Hacía ya muchos años que tenía la idea de crear un Blog y nunca realmente me decidí a hacerlo, así que pensé que este sería un buen momento para empezar a desarrollar aquellas ideas que hace tantos años no se expresan más allá que dentro de los límites de mi cerebro :)

Para quienes puedan caer en este sitio por mera casualidad, me presento: soy una porteña de 17 años, amante de las artes, y enamorada del mundo.

Este año está siendo algo particular para mí. Además de que es mi último año escolar (asisto al mismo colegio desde hace 15 años), me di cuenta de que se produjeron en mí muchos, MUCHOS, cambios. De repente descubrí lo que es realmente amar a alguien y de qué se tratan la verdadera amistad y el quererse a uno mismo tal y como uno es. Se me sumaron muchísimos nuevos intereses, y otros viejos dejaron de ser tan relevantes. También me encontré súbitamente decidiendo las carreras a las que me voy a dedicar el resto de mi vida (dichas sean de paso: cine y traductorado de francés).

En fin, creo que podría describir a este 2009 como un año de crecimiento pleno. Y lo genial de este último es que me gusta muchísimo, y que realmente lo estoy disfrutando. Espero actualizar este diario con frecuencia y no dejarme estar, como muchas veces me pasa, jaj :)